Cepillo de latón para limpiar los electrodos de masa y central de las bujías.
Dado que los cepillos de acero hacen que la superficie sea innecesariamente áspera y, por lo tanto, la suciedad nueva se adhiere aún mejor que antes,
para limpiar las bujías debe utilizarse siempre un cepillo de un material más blando que el acero.